Promesas incumplidas. Eso es lo que ha ocurrido en estos últimos años con tecnologías y productos que nos prometieron de todo y que se quedaron en el intento.
Algunos nos quisieron vender las maravillas de los móviles modulares, de los bots de mensajería o de la impresión 3D, pero lo cierto es que ni esas ni otras muchas tecnologías han logrado cuajar. Hemos querido repasar lo que ha ocurrido desde 2014 o 2015 en el segmento, y aquí tenéis los grandes fracasos tecnológicos de estos últimos años.
Magic Leap
La realidad aumentada es el futuro. O lo era. Es lo que prometía Magic Leap, la misteriosa startup que logró crear una expectación absolutamente increíble en un ámbito en el que ninguna empresa —Apple incluida— había logrado disipar las dudas.
La realidad aumentada no parecía tan revolucionaria a la vista de lo que nos habían ofrecido las empresas que apostaron por ella, pero Magic Leap parecía tener algo especial. Muchos inversores lo creyeron, y los fundadores de la empresa lograron recaudar 2.300 millones de dólares y convertirse en una de las empresas con más proyección de cara al futuro.
Lo que prometieron, no obstante, fue muy distinto de lo que acabaron ofreciendo. Con su primer producto, las Magic Leap One Edition, se comprobó que la propuesta de la empresa no tenía apenas nada de diferencial. Las ventas fueron un desastre y volvieron a consolidar el fracaso de una industria, la de la realidad aumentada, que sigue sin plantear revoluciones.
Teclados de mariposa de Apple
Apple debía tener poderosas razones para cambiar los teclados de sus MacBook, porque el caso es que jamás hubo demasiadas quejas al respecto —de hecho lo que solía haber eran elogios—. Lo hizo al integrar los primeros teclados de mariposa ('butterfly') en sus equipos, un cambio que fue aplicando a todos sus portátiles gradualmente y que acabó siendo uno de sus grandes fracasos en hardware en los últimos años.
El problema es que esos teclados fallaban mucho más de lo asumible. Tras crear patentes en este sentido, la implementación de los teclados de mariposa fue un pequeño desastre que causó que incluso los más fieles usuarios de Apple criticaran problemas de unos teclados en los que de repente algunas teclas dejaban de funcionar sin razón aparente.
La empresa de Cupertino acabó aceptando la derrota, primero con un programa de reparación gratuita y luego con el lanzamiento de los MacBook Pro a finales de 2009. Aquellas máquinas por fin recuperaban el sistema de tijera y daban por concluido un experimento que hubiera sido mejor no haber realizado. Si funciona, dicen, no lo toques.
Google Daydream
La realidad virtual se volvía accesible con las mágicas Google Cardboard, aquellas gafas cartón que permitían que cualquiera con un móvil pudiera disfrutar de experiencias sorprendentemente decentes en este segmento. La revolución que muchos prometieron parecía posible.
Google pareció creer en esa revolución también, porque en octubre de 2016 llegaba Google Daydream, la versión "Premium" de aquellas Cardboard. Seguían dependiendo del móvil, pero ofrecían un acercamiento más pulido a esos contenidos y experiencias que planteaban la alternativa a soluciones basadas en el PC como las Oculus Rift.
Aquello pronto demostró ser un farol de Google, que apenas sí volvió a mostrar interés en un segmento que tampoco crecía como se había esperado. En octubre de 2019, tres años después de aquel lanzamiento, Google hacía desaparecer las gafas Daydream de su tienda online. Aunque los contenidos seguían disponibles y la realidad virtual avanzaba en otras alternativas, Google la descartaba casi de forma total a nivel estratégico. Eso sí: al menos liberaron el código de Cardboard algo más tarde. Algo es algo.
Wii U
La Nintendo Wii había sido todo un soplo de aire fresco para la industria de los videojuegos, así que cuando Nintendo presentó la Wii U seis años después, en 2012, todos pensábamos que aquello podría ser un nuevo bombazo.
Lamentablemente no fue así: las ventas pronto demostraron que el producto cojeaba y no lograba triunfar ni siquiera entre los fans habituales de Nintendo. Algunos títulos de éxito lograron disfrazar la situación, pero nunca la ocultaron del todo.
El fracaso acabó siendo sonado para una consola que no logró demostrar lo que Nintendo quería, pero que al menos sentó las bases para una vuelta a la carga espectacular. Cuando muchos daban por defenestrada a Nintendo, la empresa logró sacar una Nintendo Switch que ha vuelto a demostrar por qué Nintendo sigue siendo mucha Nintendo.
Project ARA y los móviles modulares
Cuando Motorola inició la andadura del llamado Project Ara que Google se apropió, convirtió a este proyecto en una de las ideas más llamativas de los últimos años en el terreno de la movilidad.
De repente sería factible construir un móvil por piezas, como hacemos con los PCs, algo que teóricamente alargaría la vida útil del móvil al poder sustituir solo aquellas partes de él que dejaban de funcionar o podían hacerlo mejor. El prodigioso Fairphone adoptaba también esa personalidad modular, aunque su principal reto era el de ofrecer un smartphone ético que nunca acabó de triunfar —lo sigue intentando— a pesar de sus buenas intenciones.
Sin embargo la idea fracasó: los avances técnicos se produjeron, pero el ritmo al que lo hacían era demasiado lento y con ciertas limitaciones. Hoy en día hay algunos móviles con cierta personalidad modular (los Moto Z son los más conocidos), pero la idea en general no parece haber cuajado entre el gran público.
Theranos y la revolución biotecnológica
La idea de Theranos, como contaba nuestro compañero Javier Jiménez, "era sencilla pero revolucionaria: crear un dispositivo manual que permitiera hacer análisis de sangre en tiempo real".
Aquella gran promesa de la biotecnología convirtió a su creadora, Elizabeth Holmes, en la "mil millonaria hecha-a-sí-misma más joven del mundo", gracias a una valoración de 9.000 millones en una empresa que mantenía un secretismo enorme.
Aquello acabó explotando: los tests de sangre que habían prometido el oro y el moro eran poco fiables y poco válidos, y los que funcionaban lo hacían con tecnología de Siemens. Aquello fue una gigantesca pantomima, una falsa revolución que lo prometió todo sin demostrar nunca nada.
Baterías revolucionarias
Si hay un problema con esa tecnología móvil que nos rodea esa es la de la autonomía de las baterías. Esos dispositivos compactos no pueden contar con grandes baterías, y a pesar de las mejoras en eficiencia a todos nos extraña cómo la tecnología básica de baterías no ha cambiado demasiado en los últimos años.
Hemos visto todo tipo de desarrollos que prometían duplicar o triplicar la capacidad o densidad energética de las baterías con la sustitución de algunos de sus materiales, pero la realidad es que ninguna de esos proyectos —u otros que solucionaban otros problemas— ha acabado implantándose en masa.
De hecho lo único que hemos logrado en estos últimos años ha sido beneficiarnos de la carga rápida o de la tecnología de carga inalámbrica disponible en algunos de nuestros dispositivos. Son mejoras sensibles, desde luego, pero el gran problema de base sigue existiendo, y todos esperamos que un día u otro tengamos por fin una tecnología de baterías que suponga una verdadera revolución.
Mensajería a base de bots
El éxito aplastante de la mensajería instantánea como medio de comunicación hizo que hace dos años apareciera una nueva e interesante vertiente para aprovechar el fenómeno: los bots integrados en clientes de mensajería.
Estos bots eran algo así como la "versión texto" de los conocidos asistentes de voz. Herramientas a menudo sorprendentes y prometedoras que permitían interactuar con diversas plataformas y productos a través de comandos escritos, y no de voz.
La idea no era nueva (en IRC se usaban hace más de dos décadas) pero de repente todas las grandes de la tecnología apostaron por esos bots de mensajería.
Y sin embargo todos (WeChat, Skype, Facebook Messenger) acabaron fracasando: para ciertas cosas, parece, la gente prefería seguir hablando de viva voz. La revolución de los bots no fue tal en el mundo de la mensajería.
Wearables que acaban cansando
La aparición de Pebble en el firmamento tecnológico fue una de las más sonadas de los últimos años. La empresa que nos hizo soñar a todos con la revolución de los wearables inició la fiebre de los relojes inteligentes, pero también las pulseras cuantificadoras salieron reforzadas.
Aquel proyecto nos quiso convencer de que al igual que al ordenador le sustituyó el móvil, al móvil le sustituiría el reloj. No fue así, y pronto se comprobó que muchos de estos wearables estaban demasiado limitados por sus propias dimensiones: en realidad eran más accesorios de nuestro smartphone que otra cosa. Muchos acabaron retirándose del mercado.
Es cierto que el fenómeno de los werables no ha desaparecido —que se lo digan al Apple Watch o a Fitbit—, pero lo cierto es que una vez más las promesas no se cumplieron. La idea era fantástica, pero todo este tiempo ha demostrado que estos productos, aunque interesantes y populares para ciertos escenarios (el deporte y sobre todo la salud, poco a poco más presente en ellos), no son probablemente la revolución que los fabricantes nos quisieron vender.
Google Glass y un mundo de gafas inteligentes
Todo era repugnancia y fascinación en las Google Glass. Ver a aquellos paracaidistas emitir en directo su salto a través de este producto en junio de 2012 fue espectacular, y aquellas gafas conectadas parecían casi un producto de ciencia ficción por todo lo que hacían y tenían... para bien o para mal.
El proyecto estrella de Sergey Brin capturó la imaginación de la industria y los usuarios, y solo poder probarlas durante unos minutos se convirtió para muchos en un acontecimiento. La posibilidad de contar con información accesible a golpe de comandos de voz o táctiles o de grabar vídeo y sacar fotos de forma tan llamativa nos atrapó.
Aquella primera revolución de la realidad aumentada se quedó en nada. El elevado precio de las gafas se unió a la preocupación por los desarrollos que podrían aprovecharla y sobre todo por cuestiones de privacidad ("eh, ¿me estás grabando con esas gafas?"). Las gafas de Google están teniendo ahora una segunda oportunidad, pero ya sin plantear esa revolución masiva.
Kinect nos quiso levantar del asiento
Cuando Microsoft comenzó a comercializar Kinect lo hizo con la intención de ir un paso más allá de lo que había ido Nintendo en su espectacular Nintendo Wii.
El sistema de control de gestos parecía poder ir más allá de la propuesta de los japoneses, y Microsoft apostó tanto a Kinect que se equivocó en la apuesta. Ni los juegos lograron cumplir con la promesa, ni tampoco otros desarrollos paralelos pero incluso más interesantes (rehabilitación de pacientes con lesiones, por ejemplo).
Kinect acabó siendo una condena en el lanzamiento de las Xbox One originales, y aquella revolución que planteaba Microsoft para que jugáramos de pie y con gestos no fue mucho más allá de lo que nos proponía Wii Sports. Microsoft se dio cuenta demasiado tarde del error, y para entonces la PlayStation 4 ya le había roto la cintura. Microsoft, claro, tuvo que volver a jugar sentada.
Spectacles y otra amenaza a la privacidad
Cuando Snapchat anunció las Spectacles lo hizo con un enfoque fantástico. Esos pequeños clips de 10 segundos grabados con un curioso formato circular (adiós al modo retrato y apaisado) parecían ser la solución perfecta para una industria que seguía sin acertar en este tipo de escenarios del livestreaming.
La fiebre por compartir que nos han contagiado las redes sociales hacían que este dispositivo se planteara como una solución perfecta especialmente para un público joven que las acogió con entusiasmo. La demanda parecía ser espectacular... hasta que dejó de serlo.
Las Spectacles acabaron por no interesar prácticamente nada. Las ventas fueron mínimas y las nuevas amenazas que planteaban a nuestra privacidad fueron uno de los motivos de un dispositivo que quizás llevaba el fenómeno de las redes sociales demasiado lejos.
El malogrado DNI Electrónico
En España el Documento Nacional de Identidad (DNI) necesitaba una renovación que lo adaptara a los tiempos, y aquella ambición culminó con la creación del DNI Electrónico (DNIe), que gracias a su chip inteligente prometía convertirse en medio perfecto de identificación y autenticación en todo tipo de escenarios.
La promesa acabó quedándose en casi nada. A pesar del impulso inicial y de la subvención de 300.000 lectores de DNIe, la tecnología funcionaba de forma limitada (navegadores obsoletos, verificaciones interminables) o, simplemente, no lo hacía.
Los problemas no se quedaron ahí, y hace unos meses pudimos comprobar como la seguridad que nos prometía esta plataforma no existía. El caos y las vulnerabilidades provocaron más confusión para acabar de enterrar —al menos, de momento— un documento que seguimos usando como hace 50 años: como si no tuviera el chip inteligente.
Amazon Fire Phone
Todos esperamos mucho de los gigantes tecnológicos, y durante años se habló de la potencial aparición de un smartphone propio de Amazon. Aquel dispositivo acabó apareciendo gracias al lanzamiento del Amazon Fire Phone, pero aquel producto demostró ser un completo despropósito.
El producto estaba planteado para revolucionar la forma en la que compramos productos. Sus cuatro cámaras frontales planteaban una "perspectiva dinámica" que tenía muy pocas aplicaciones prácticas.
Aunque había ideas interesantes como el botón "FireFly" para reconocer objetos y ofrecernos su precio en Amazon, aquel producto estaba condenado por un precio demencial para las prestaciones que ofrecía. Al final el Fire Phone no era más que un producto para que comprásemos aún más en Amazon, no para resolver ningún problema esencial en el mundo de la movilidad. La idea podría tener ahora una segunda oportunidad, pero la empresa de Jeff Bezos tendrá que tener cuidado con su planteamiento.
Windows Phone ante el abismo
Hay quien cree que la plataforma móvil de Microsoft no está muerta y está de parranda, pero lo cierto es que el fracaso de sus numerosos intentos en este segmento ha sido estrepitoso, algo irónico si tenemos en cuenta que Microsoft lleva intentándolo mucho más que cualquiera de sus dos grandes competidoras.
Aquellos primeros pasos con Windows CE y Windows Mobile acabaron derivando a una estrategia en la que un Windows Phone bastante más capaz parecía tener cierto futuro. La compra de Nokia fue un craso error para una plataforma que pronto intentaría un giro radical con el lanzamiento de Windows 10 y las aplicaciones universales.
Aquello no fue suficiente: la plataforma estaba aún muy verde en móviles, y a pesar de que la interesante idea de la convergencia tenía recorrido, la realidad era evidente: Windows en móviles no convencía a los usuarios de Android e iOS, felices con ecosistemas maduros y difícilmente alcanzables en cantidad y calidad del catálogo software. Es difícil saber si Microsoft volverá a intentarlo, pero aquella particular revolución de las aplicaciones universales ha quedado aparentemente muerta y olvidada... aunque algunos sigamos teniendo fe en una nueva oportunidad.
Impresoras 3D y la nueva revolución (doméstica) industrial
La posibilidad de que uno mismo pudiera programar una aplicación o juego a medida revolucionó nuestro mundo, pero a esa parte software le faltaba la parte del hardware: seguíamos dependiendo de los fabricantes para tener productos físicos con los que trabajar o disfrutar (u otras cosas más polémicas).
Las impresoras 3D parecían poder cambiar todo eso. De repente cualquiera podía fabricar todo tipo de objetos con una tecnología que llevaba esa capacidad a los hogares y que resultaba tan llamativa como atractiva.
Esa revolución tampoco ha cuajado como pensábamos. Quizás nos entusiasmamos demasiado con una tecnología que a pesar de sus virtudes tenía limitaciones importantes (materiales, velocidad, e incluso coste) para la mayoría de los usuarios para los que parecía poder plantear ese cambio. Las impresoras 3D siguen avanzando y demostrando capacidades sorprendentes, pero algunos esperábamos (seguramente de forma equivocada) mucho más.
Nexus Q, la música no es tan social como pensabas
Puede que el Nexus Q de Google no planteara una revolución tan enorme como otras plataformas, tecnologías y productos de los que hemos hablado con anterioridad, pero su idea desde luego era singular: de repente la música quería ser más social.
Esa era la arriesgada propuesta de un producto que era arriesgado también en todo lo demás. Aquel particular diseño cuasi-esférico y su propuesta hardware lo hacían desde luego atractivo y prometedor, pero las críticas le llovieron desde el primer momento.
De hecho el Nexus Q se convirtió en el que es probablemente en el fracaso más estrepitoso de Google a nivel hardware. Ha habido muchos otros en su software y servicios (se nos queda en el tintero Google+, por ejemplo), pero su precio y prestaciones no convencieron a nadie. Aún así aquel esfuerzo no fue estéril, porque los Chromecast recogieron el testigo con un éxito arrollador.
Bonus Track: estas tecnologías siguen sin demostrar todo lo que prometieron
A todos estos grandes francasos de tecnologías y productos que nos dieron mucho menos de lo que prometían se le unen algunas tendencias que a pesar de su proyección siguen sin demostrar todo lo que plantean sus creadores y defensores.
Es el caso desde luego de la cadena de bloques. Las criptodivisas que ahora baten récords y vuelven a generar mucha expectación eran en realidad solo parte de la promesa del revolucionario blockchain, pero su validez práctica sigue siendo discutible. La cadena de bloques siempre ha tenido un futuro prometedor, pero de nuevo nos encontramos con una idea aparentemente fantástica que sigue sin demostrarlo de forma patente.
También nos sentimos defraudados por la realidad virtual y la realidad aumentada, dos plataformas tecnológicas que han quedado demasiado encasilladas en el segmento de los videojuegos y que parecían tener mucho más potencial tanto en ellos como fuera de ellos. Los últimos avances de empresas como Apple, Google o Microsoft o Magic Leap permiten cierto optimismo, pero seguimos sin ver esa 'killer app' que necesitan tanto la realidad virtual como la aumentada.
La tercera de esas grandes tendencias por las que muchos seguimos preguntándonos es la de la Internet de las Cosas, que plantea un mundo hiperconectado y en el que los beneficios para la sociedad son enormes. Un mundo en el que la tecnología se adelantará a nuestras necesidades gracias a millones de sensores que recolectarán información sin parar (más aún, con todo lo que eso implica). Por ahora la idea está relegada a ese segmento maker con plataformas diversas (a menudo incompatibles) que tratan de convencernos de un futuro que tampoco vemos de momento con claridad. Esperemos que no sea algo así.
En Xataka | Estos son los tres fracasos más estrepitosos de Nintendo, y así fue como consiguió salir reforzada
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La innovación tecnológica es un conjunto de inventos que se caracterizan por suplir necesidades de la comunidad de una manera novedosa y que sin el desarrollo de la tecnológica, no existirían.
Gracias a todos los avances que han realizado los ingenieros y científicos recientemente, la tecnología permite que las innovaciones en este siglo superen incluso a las observadas en las películas de ficción.
Toda empresa que tenga un producto o servicio siempre debe tener presente que la tecnología como la conocemos, no durará para siempre. La innovación tecnológica permite que a medida que las necesidades vayan cambiando, los ciudadanos o las empresas pueden actualizarse constantemente.
Es por esto, que conocer ejemplos de innovaciones tecnológicas es muy importante. Ya que ayudan a ejemplificar un concepto que abarca muchos aspectos del mundo empresarial. Y que no solo están relacionados con la tecnología.
¿Qué es la innovación tecnológica?
Al referirnos a innovación tecnológica hablamos sobre la elaboración de un producto o servicio nuevo que va dirigido a un grupo de consumidores. Es decir, solo podemos hablar de innovación cuando una empresa lanza al mercado nuevos productos o mejoran los que ya tienen.
A pesar de que cuando hablamos de innovación solemos pensar en el proceso de comercialización del producto o servicio, también puede relacionarse con los procesos de producción de una empresa. Al final, la innovación son cambios que ocurren dentro de una.
Y aunque se llama innovación tecnológica, esta no se ocupa solamente de las modificaciones que ocurren en la tecnología. Los cambios pueden abarcar muchos sectores que también son muy importantes dentro de una empresa, como lo son las investigaciones científicas, económicas y comerciales.
El propósito de este tipo de innovación es que al final una empresa pueda ofrecer elementos nuevos en un mercado local, nacional o internacional. Además, puede incluir la creación o modificación de nuevos procesos de producción, así como métodos para lograrlo y gestionarlo.
Los tipos de innovación tecnológica
Como mencionamos anteriormente, la innovación tecnológica involucra una gran cantidad de decisiones y acciones, que varían de una tarea a otra. Es por esto, que podemos clasificarla en 4 tipos principales:
1. Innovación tecnológica de tipo radical
Como su nombre lo indica, este es uno de los ejemplos de innovaciones tecnológicas que te permiten llegar a mercados nuevos. También pueden ser sectores o industrias donde se puedan desarrollar servicios especiales.
Lo más común es que la innovación tecnológica radical sea implementada por gerentes en la administración pública, servicios o empresas dedicadas al sector cultural.
2. Innovación tecnológica de tipo incremental
Este es uno de los ejemplos de innovaciones tecnológicas más progresivas. Esto se debe porque en vez de abrir nuevos procesos de producción o mercados, busca mejorar los que existentes, siempre teniendo en cuenta las características esenciales de los mismos.
Básicamente es un tipo de innovación que permite ofrecer tecnológicas más avanzadas, pero no crear nuevas.
3. Innovación tecnológica mixta
En este tipo podemos observas dos cambios, que involucran tanto las tecnológicas como los paradigmas.
En el aspecto tecnológico, hay tanto innovaciones radicales como incrementales. Pero, estas también pueden estar relacionadas con los mapas organizacionales de una empresa.
Y en los paradigmas, nos referimos al cambio que se logra alcanzar en ideas ya establecidas y que están relacionadas con los procesos tecnológicos y de producción. Es decir, lograr un cambio en este aspecto llevaría a una verdadera revolución industrial.
Ventajas de la innovación tecnológica
1. Te permite cultivar mercados nuevos o existentes
Uno de los principales beneficios de la tecnología es su capacidad para ayudar a las empresas incluso más pequeñas a competir en un escenario global.
Las innovaciones como Internet, por ejemplo, permiten que un propietario único ofrezca sus productos o servicios a clientes potenciales de todo el mundo mediante el uso de un sitio web.
Puede proporcionar descripciones detalladas de los productos y fotos de sus productos para mostrar a los clientes potenciales toda la información que necesitan para tomar la decisión de comprar.
Los medios de comunicación social como Facebook y Twitter también permiten conectarte con otras personas que pueden estar interesadas en tu negocio, sin la necesidad de interacción cara a cara.
2. Ayuda a reducir costos
La innovación tecnológica también puede ayudar a los dueños de negocios a mantener los costos al mínimo.
Con el uso de la automatización, un pequeño fabricante puede reducir su dependencia de los seres humanos para realizar algunos de los procesos de producción necesarios.
Como resultado, el negocio puede reducir los gastos de los empleados, como el salario, los beneficios y la rotación. La tecnología también puede ayudar a racionalizar el proceso de producción, eliminando el desperdicio que al final es costoso.
La ejecución de un proceso de fabricación "apuesto" como Six Sigma, ofrece la oportunidad de satisfacer la demanda de los clientes de manera más rápida y eficiente.
3. Obtienes información oportuna
Un beneficio clave de la contabilidad automatizada es la gran cantidad de información pertinente que está disponible para el propietario del negocio.
Utilizando los datos procesados y extraídos de sus transacciones diarias, el software de la computadora puede permitirle medir rápidamente la efectividad de una campaña publicitaria, verificar si sus impuestos son actuales y saber si tiene criticas.
Aunque muchas pequeñas empresas tienen relativamente pocas transacciones y pueden hacer su contabilidad a mano, puedes obtener ganancias sustanciales invirtiendo en una computadora y un software de contabilidad.
Desventajas de la innovación tecnológica
1. Baja moral del trabajador
Si bien la innovación tecnológica puede reducir la dependencia de una fuerza laboral, la otra cara es que los empleados pueden perder empleos en el proceso.
En el caso de un propietario de una pequeña empresa, esto puede significar que debe tomar una decisión difícil entre aumentar las ganancias o dejar a los empleados de mucho tiempo.
Incluso si la implementación no resulta en la pérdida de trabajo, algunos empleados pueden tener dificultades para adaptarse al cambio. También puede haber una curva de aprendizaje al establecer el cambio, lo que resulta en una reducción de la productividad a corto plazo.
El equipo de la fuerza laboral en su conjunto puede sufrir una baja moral incluso si la tecnología afecta solo a unas pocas personas.
2. Inicialmente, puede generar más gastos
Si bien la nueva tecnología puede generar ahorros a largo plazo, es posible que veas un gasto inicial significativo.
El propietario de una pequeña empresa puede no tener los recursos para comprar un sistema informático de última generación o maquinaria nueva, o puede que necesite pedir prestado dinero para hacerlo.
Si la nueva compra no aumenta la producción ni reduce los gastos a largo plazo, podría tener un efecto devastador en la viabilidad a largo plazo de la empresa.
3. Puede traer muchos dolores de cabeza
Hay un viejo dicho, "Los pioneros toman las primeras flechas", que encaja bien con la complicada relación entre negocios y tecnología.
En muchos casos, la nueva tecnología trae nuevos dolores de cabeza: errores de software, problemas de compatibilidad y falta de familiaridad por parte del personal de soporte del proveedor.
Debido a problemas de confiabilidad, te encuentras en la situación en la que tu empresa necesita funcionar con tu tecnología anterior mientras se aprende a manejar la nueva versión.
Características de las empresas innovadoras
Para que una empresa pueda alcanzar el éxito, es necesario que constantemente deba desarrollar innovaciones tecnológicas que les ayude adaptarse a los cambios tan volátiles del mercado y las necesidades de la sociedad.
Es por esto, que cualquier negocio que quiera ser innovador debe tener en cuenta tres características muy importantes: Eficiencia, competitividad y calidad.
Si se tiene presente estos aspectos, toda empresa tiene la capacidad de mejorar o crear sus productos o servicios. Además, puede rentabilizar económicamente la inversión que ha realizado, observando un aumento en las ventas.
Es importante que las empresas puedan darse cuenta de que mejorar puede llevar a cara en un futuro, para poder suplir las necesidades del consumidor y a los procesos de producción propios de la empresa.
Al final, una empresa que se considere innovadora debe tener la capacidad de crear o mejorar productos o servicios, incluso utilizando los mismos procesos de producción.
También, es posible que necesite realizar cambios en el sistema organizativo de la empresa y deba modificar la contratación de profesionales, pidiendo habilidades distintas para adaptarse a los cambios.
Ejemplos de innovaciones tecnológicas más importantes
Desde 2001, MIT Technology Review ha publicado su lista de las 10 innovaciones tecnológicas más importantes que surgen cada año.
Los editores seleccionaron cada elemento en función de su potencial para cambiar el mundo.
Las listas de años anteriores incluían epigenética, redes inalámbricas de sensores, computación en red, fabricación aditiva, relojes inteligentes y dispositivos móviles 3-D.
La lista de este año es igual de emocionante.
1. Innovaciones tecnológicas: Drones agrícolas
Los agricultores han comenzado a usar drones agrícolas con cámaras para mejorar el tratamiento de sus cultivos.
Los drones permiten a los agricultores una perspectiva única que las imágenes de satélite utilizadas anteriormente no podían proporcionar.
Ayudan a exponer problemas con el tratamiento de riego, la variación del suelo y las plantas en dificultades a un costo mucho menor que métodos como la obtención de imágenes de cultivos con un avión tripulado.
El éxito de los drones es posible gracias a los avances tecnológicos en módulos GPS, radios digitales y pequeños sensores MEMS. Juntos, estos avances permiten a los agricultores aportar mayor precisión a su oficio para obtener mayores recompensas.
2. Smartphones ultraprivados
A medida que crecen las preocupaciones sobre la privacidad personal, particularmente en términos de nuevas tecnologías, una empresa con sede en Maryland busca ofrecer una alternativa.
Silent Circle se toma muy en serio la innovación tecnológica. Ellos encriptan las llamadas de voz, mensajes de texto y archivos adjuntos de los clientes. El cifrado evita que los espías potenciales escuchen las llamadas telefónicas y protege los metadatos.
Silent Circle tiene grandes planes para el futuro, incluido un teléfono inteligente seguro llamado Blackphone.
Blackphone utilizará herramientas de encriptación utilizadas actualmente por Silent Circle, así como otro software que ayudará a proteger los datos.
3. Mapeo cerebral
Los neurocientíficos han trabajado durante décadas para comprender mejor cómo funciona el cerebro. Los recientes avances en la tecnología de mapeo cerebral han facilitado esa tarea ambiciosa.
Un equipo internacional de investigadores del Proyecto Cerebro Humano ha creado un atlas tridimensional del cerebro.
La resolución de los mapas es cincuenta veces mejor que los esfuerzos anteriores, donde los creadores del atlas cosieron digitalmente miles de secciones de cerebro.
El mapa muestra detalles de hasta 20 micrómetros de tamaño, el tamaño estimado de muchas células humanas. Si bien este es un gran avance, los científicos todavía tienen como objetivo crear un mapa que muestre detalles a 1 o 2 micrómetros.
4. Chips neuromórficos
Muchas compañías en todo el mundo están trabajando para difuminar las líneas entre los sistemas biológicos y las creaciones hechas por el hombre.
Qualcomm está dando pasos significativos en el desarrollo del sistema de inteligencia artificial con el uso de chips neuromórficos. Estos chips combinan la neurología con tecnologías tradicionales como los chips de teléfonos inteligentes.
Además, esta empresa ya está probando chips en pequeños robots que permiten a las máquinas realizar tareas que generalmente requieren una computadora personalizada. Los chips pueden procesar datos sensoriales a través de la vista y el sonido, para responder de formas que no están programadas explícitamente.
Por ejemplo, los chips podrían anticipar las necesidades del usuario.
5. Edición del genoma
Investigadores en China crearon un par de monos con mutaciones genéticas específicas.
Los científicos utilizaron un nuevo método de ingeniería de ADN conocido como CRISPR. Este permite a los científicos modificar los óvulos fertilizados.
Esta innovación tecnológica tiene grandes implicaciones para el campo de la biomedicina. La capacidad de alterar el ADN en ubicaciones específicas en los cromosomas facilita el estudio de enfermedades.
Además, Investigadores del MIT han expresado interés en estudiar trastornos cerebrales como el autismo y la enfermedad de Alzheimer.
Con este método, se tiene el potencial de ayudar a los investigadores que estudian tales dolencias, permitiéndoles identificar qué mutaciones genéticas realmente causan los trastornos.
6. Impresión 3d a microescala
El potencial de la tecnología de impresión 3D ha entusiasmado a muchas personas con las nuevas aplicaciones. Pero las impresoras actuales tienen limitaciones importantes, ya que hasta hace poco, la mayoría de las impresoras 3D solo podían usar plástico.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Harvard, dirigido por Jennifer Lewis, ha comenzado a desarrollar nuevas tintas para impresoras 3-D. Su equipo imprime objetos complejos utilizando materiales que se eligen en función de sus propiedades mecánicas, conductividad eléctrica o rasgos ópticos.
Eventualmente, las nuevas tintas permitirán una variedad más amplia de funciones, incluida la creación de órganos artificiales.
7. Colaboración móvil
La infraestructura actual para colaborar en un entorno profesional puede ser contraproducente para realizar el trabajo. Este problema es uno que las nuevas aplicaciones como Quip pretenden resolver.
Su objetivo es crear una experiencia más íntima mediante la implementación de funciones de chat y una fuente de noticias al estilo de Facebook, creando una experiencia más colaborativa.
Estas nuevas plataformas tienen como objetivo mejorar la eficiencia y la productividad de los flujos de trabajo actuales.
8. Oculus rift
Facebook compró Oculus Rift por $ 2 mil millones, y por una buena razón.
La compañía nació de la mente de Palmer Luckey, un niño sin educación en ingeniería que construyó el primer prototipo para el Rift cuando tenía 16 años. Ahora 21 años, Luckey ha creado un producto que hace realidad el videojuego inmersivo.
El Rift está diseñado para que los usuarios se sientan como si realmente estuvieran dentro del mundo del juego siguiendo sus movimientos en tiempo real.
Si bien los videojuegos son el mercado objetivo, la tecnología también tiene implicaciones para el diseño de la arquitectura, el entrenamiento de respuesta a emergencias, la terapia de fobia y mucho más.
9. Robots ágiles
Dar un solo paso requiere equilibrio, coordinación, fuerza y dirección. Cada uno de estos factores ha presentado desafíos únicos para los ingenieros que diseñan robots que pueden caminar.
Boston Dynamics ha experimentado con el "equilibrio dinámico", una característica que permite a los robots mantener el equilibrio mientras caminan. Recientemente, crearon con éxito un robot que puede atravesar terrenos irregulares e inestables.
Esta nueva innovación tecnológica abre las puertas para un mayor uso de robots en operaciones de emergencia o para ayudar a las personas mayores y discapacitadas con las tareas diarias.
Si bien la tecnología aún se encuentra en la etapa de desarrollo, Boston Dynamics sabe que los robots deben caminar antes de poder correr.
10. Energía eólica y solar inteligente
Una barrera para el uso generalizado de las energías renovables es la integración de fuentes de energía sostenibles en la red eléctrica actual.
Los grandes datos y la inteligencia artificial han hecho que sea más fácil predecir cuánta potencia producirán las turbinas eólicas.
Anticipar las fluctuaciones de energía es clave para desarrollar tecnologías para integrar la energía eólica y solar en la red eléctrica.
Es cuestión de saber cómo la innovación tecnológica
La innovación tecnológica puede traer muchos beneficios para tu empresa. Saber cómo aplicarla y estudiar los ejemplos que hemos dado es esencial para poder triunfar en ella.
Aunque puede requerir una inversión significativa, sobre todo si tienes una empresa pequeña, desarrollar tecnológica puede ser ese extra que necesita tu marca para pasar al siguiente nivel.
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