¿De qué manera la domótica ayuda al medioambiente?
30 septiembre, 2018
La eficiencia energética en los hogares inteligentes no solo es un requerimiento de las nuevas generaciones, que buscan mejorar su calidad de vida, también es una herramienta que contribuye con el bienestar del planeta, por medio del ahorro en el consumo dentro de las viviendas.
El término domótica se refiere al conjunto de sistemas que automatizan diferentes aspectos dentro de una casa. Específicamente, las instalaciones se optimizan por medio de la conexión a dispositivos inteligentes, que otorgan un control completo al usuario y que permiten activar o desactivarlos remotamente desde cualquier lugar.
Sistemas como Smart Security no solo nacen con la idea de optimar al máximo los recursos que se utilizan a diario. También tienen como finalidad conducir a un estilo de vida amigable con nuestro entorno, reduciendo notoriamente los niveles de energía en los dispositivos de uso diario.
Al tener control total de los aparatos electrónicos de la vivienda notaremos, desde el primer mes, una reducción importante del consumo energético, que se traduce en una disminución del valor de las cuentas de fin de mes. Pero más que eso, en un aporte positivo hacia el medio ambiente; reduciendo la huella de carbono emitida desde nuestro hogar y, en consecuencia, aportando con un grano de arena al ahorro y conservación de los recursos no renovables.
¿Imagina si todos lo hicieran? Se conseguiría un cambio dramático en términos de consumo excesivo de las fuentes de energía y se evitaría y disminuiría el impacto del efecto invernadero como consecuencia de la emanación indiscriminada de energía.
Limitar los consumos excesivos es posible gracias a la tecnología que provee Smart Security. La automatización de determinados sectores del hogar, por medio de la instalación de sistemas inteligentes, contribuye al consumo responsable.
¿Cómo funciona? Es muy sencillo. Al tener la posibilidad de controlar el encendido o apagado de los dispositivos eléctricos de nuestro hogar cuando están en desuso, ahorramos energía.
El sistema inteligente también permite controlar los sistemas de iluminación. Apagarlos si es que han quedado encendidos por accidente o programarlos para sacar el máximo provecho de las horas de luz natural. Todo con el fin de no incurrir consumos innecesarios.
Lo mismo ocurre con el sistema de calefacción. Brinda la opción de programar el encendido minutos antes de llegar, evitando un desperdicio de calor y utilizando el sistema solo durante las horas que necesario.
Smart Security es una opción innovadora, fácil de usar y conveniente, pues no solo te entrega control completo de los aparatos electrónicos de tu hogar. También te da los equipos para monitorear tu hogar 24/7, armar y desarmar las cerraduras, vincular cámaras IP, cuidando el medio ambiente y tus gastos a fin de mes. ¡Todo por medio de tu smartphone! Es la solución del futuro y lo que todos estábamos esperando.
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Tiempo de lectura: 3 minutos
17 mayo 2022
Publicada en —
Eficiencia energética
Desde la introducción de los dispositivos inteligentes, su popularidad y uso han aumentado considerablemente. Según el estudio de Statista, hay más de 23 mil millones de dispositivos IoT conectados, de los cuales 7 millones están constantemente conectados a Internet. Asimismo, aseguran que el número total se duplicará en los próximos años. A medida que surjan nuevas tecnologías, encontraremos formas novedosas de incorporar estos sistemas a todos los espacios.
Algunas de las principales ventajas que trae consigo la domótica son la seguridad, confort, ahorro energético y disfrute. Sin embargo, esta puede desempeñar un papel fundamental para cuidar el medio ambiente del planeta.
Relación entre domótica y sostenibilidad
La domótica estudia las tecnologías aplicadas a la automatización de tareas con especial atención a los temas medioambientales, eficiencia energética, seguridad y la mejora del bienestar.
A medida que las personas se dan cuenta de que deben ser más responsables y conscientes sobre la cantidad de energía que se consume en el día a día, existe una necesidad urgente de reducir el uso de energía. Hay miles de millones de hogares, hoteles, oficinas e industrias en todo el mundo que pueden contribuir a generar un cambio ambiental positivo, basado únicamente en una alteración de los patrones energéticos.
Una de las formas más fáciles y efectivas de hacerlo es con la domótica, es decir, integramos un sistema de administración de energía en el espacio. Esto va a permitir que todos los dispositivos inteligentes que estén disponibles en dicho espacio se integren en una entidad programable y personalizable. A su vez, permite que el usuario pueda optimizar su energía. Para tener un control total del espacio solo se necesita un teléfono móvil o una tablet.
Por tanto, cambiar a la tecnología inteligente es la decisión correcta para aquellas personas que estén dispuestas a ayudar al medio ambiente. Las principales razones por la que se debería hacer este cambio son los siguientes:
Menos energía desperdiciada en calefacción y refrigeración
Son una de las principales fuentes artificiales de emisiones de carbono. La cantidad de energía desperdiciada es aún mayor con sistemas mal regulados. Sin embargo, podemos instalar los nuevos termostatos inteligentes que permiten al usuario tomar el control total de sus dispositivos y minimizar el desperdicio.
Uso más inteligente de la iluminación y los electrodomésticos
La iluminación y los electrodomésticos son muy similares a la calefacción y la refrigeración en cuanto al desperdicio de energía. Con la tecnología inteligente únicamente se necesitará un teléfono móvil desde el que podrá monitorear, administrar, programar y optimizar los dispositivos.
Conciencia y mejor uso de la energía
Los sistemas de administración de energía para los espacios ofrecen información personalizada sobre el uso que se hace de la energía. Por tanto, el usuario podrá conocer exactamente qué dispositivos y el momento en el que consumen más energía. Esto permitirá que comprendan mejor la utilización de la energía y optimizarlo, reduciendo las emisiones de carbono.
Dispositivos domóticos que crean un entorno sostenible
Los hogares, hoteles, industrias, oficinas y todos los espacios en general, se han convertido en un consumidor constante de energía. Existen una variedad de soluciones inteligentes disponibles para reducir el consumo de energía en exceso:
Termostatos inteligentes. Ayudan a controlar la calefacción y refrigeración que necesita el espacio. Permiten un mayor control y acceso remoto mediante una aplicación móvil.
Iluminación inteligente. Las bombillas LED inteligentes consumen menos energía y son más duraderas que las bombillas tradicionales, reduciendo así la producción de residuos a lo largo del tiempo.
Enchufes inteligentes. Se pueden programar o utilizar un comando de voz para encender y apagar cualquier dispositivo que esté conectada a ellos.
Electrodomésticos inteligentes. Muchos electrodomésticos tienen integrado capacidades inteligentes que ayudan a que su funcionamiento sea más eficiente. Disponen de nuevas funcionalidades como mantenimiento del inventario de existencia, aviso de apertura de puertas o conexión con dispositivos móviles.
Sistemas de agua inteligentes. La incorporación de este sistema aumenta la eficiencia del agua. Es posible controlar y reducir su uso, e incluso detectar emergencias como roturas de tuberías o aumento de humedad.
Contamos con una gran experiencia en la instalación de sistemas inteligentes y quedamos a tu disposición para ofrecerte nuestros servicios personalizados que mejor se ajuste a tus necesidades e intereses.
Perspectiva del futuro
La calefacción y la iluminación son solo algunas áreas en las que se puede ahorrar energía, pero hay mucho más que se puede controlar y mejorar. A medida que la tecnología avance, surgirán nuevas oportunidades y los espacios deberán adaptarse en consecuencia para reducir el impacto ambiental.
Construir una nueva generación de espacios, equipados con distintas soluciones inteligentes, permite ahorrar cantidades significativas en facturas de energía y reducir el impacto de carbono en el proceso. En nuestro artículo puedes conocer más sobre cómo ahorrar en tus facturas de luz y gas.
En definitiva, utilizar estos sistemas domóticos no solamente favorece la comodidad y disfrute del propietario, sino también al medio ambiente. Si necesitas más información o asesoramiento personalizado, no dudes en ponerte en contacto con nosotros a través de nuestro correo
¿Qué tiene que ver un termostato inteligente con el cambio climático? Aunque sean dos conceptos muy diferentes que en un principio pueden no tener nada que ver, nada más lejos de la realidad. Y es que la domótica y la transición ecológica van de la mano en su desarrollo. A fin de cuentas, la capacidad de convertir nuestras casas en hogares con una gestión energética eficiente tendrá repercusiones positivas en el cuidado del medio ambiente, ya que la contaminación descenderá.
¿Qué conseguirá la domótica?
Como domótica se podría catalogar al conjunto de tecnologías que tienen como objetivo la automatización de los hogares buscando no solo la comodidad de las personas que los habitan, sino también la optimización de la citada gestión energética, el aumento de la seguridad, y la consecución de comunicaciones más eficientes.
Su desarrollo ha sido constante especialmente en los últimos años, gracias en buena medida a la aparición de tecnologías como Internet de las Cosas (IoT), ya que ha dotado a muchos aparatos y sensores con la capacidad de comunicarse entre sí y con el usuario. De ese modo, una persona ya está en disposición de manejar los diferentes electrodomésticos desde su teléfono móvil, sin importar dónde se encuentre.
Inteligencia en el hogar
La tendencia apunta a que los sistemas de control y automatización seguirán colonizando las casas de todo el mundo, convirtiéndolas en auténticos hogares inteligentes. El resultado será una utilización más racional y eficiente de la energía que se emplee para la climatización tanto en verano como en invierno, lo que a su vez conllevará un menor derroche y, por lo tanto, un descenso de la contaminación. Si a esto se une el creciente uso de las fuentes de energía renovables, parece claro cuál es el camino que se debe seguir para hacer frente al cambio climático en el que estamos inmersos.
Volviendo a los hogares inteligentes, las tecnologías que están desarrollándose no solo ayudarán a controlar de un modo más eficiente la calefacción y el aire acondicionado gracias a los citados termostatos inteligentes, sino que irán más allá: los cristales sabrán cuánta luz deben dejar pasar dependiendo de la temperatura interior y exterior; habrá sensores que suban o bajen las persianas en función de las necesidades de los habitantes y de la luz que sea necesaria; se usará el agua caliente que realmente se necesita llegando, por ejemplo, a la temperatura adecuada en el momento de la ducha (y así no derrochar litros y litros esperando a que se caliente lo suficiente); los electrodomésticos se pondrán en funcionamiento aprovechando los momentos del día en que la factura eléctrica es menor… y así un largo etcétera de posibilidades.
Parte de las smart cities
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