El mundo laboral está en la era digital, una era en la que todo cambia constantemente. El enfoque en la automatización y la digitalización tiene consecuencias para el mundo de oficinas. No pasará mucho tiempo antes de que nuestras vidas sean cambiadas completamente por la tecnología. ¿El factor más importante? ¡Digitalización! Los edificios inteligentes también entran en esta categoría. En este artículo informativo puedes leer más sobre los edificios Inteligentes y cómo puedes utilizarlos para tu empresa.
El mundo laboral está en la era digital, una era en la que todo cambia constantemente. El enfoque en la automatización y la digitalización tiene consecuencias para el mundo de oficinas. No pasará mucho tiempo antes de que nuestras vidas sean cambiadas completamente por la tecnología. ¿El factor más importante? ¡Digitalización! Los edificios inteligentes también entran en esta categoría. En este artículo informativo puedes leer más sobre los edificios Inteligentes y cómo puedes utilizarlos para tu empresa.
Las preguntas que debes tener son: ¿qué es un edificio Inteligente? ¿es un edificio inteligente algo para mi negocio? ¿qué posibilidades tengo como inquilino de una oficina inteligente? ¿cuáles son las ventajas o desventajas de un edificio inteligente? ¿es posible convertir un edificio de oficinas normal en un edificio inteligente?
¿Qué es un edificio inteligente?
Un edificio inteligente es un edificio de oficinas del futuro, pero uno que es posible tener el presente. Un edificio inteligente es, de hecho, una oficina normal y corriente a la que se han añadido componentes técnicos. La tecnología disponible está adaptada a los empleados, los visitantes y las actividades en el edificio de oficinas.
Los edificios inteligentes aprenden, estimulan y recogen datos utilizando las últimas tecnologías. Estas tecnologías pueden ser de cualquier tipo. Piensa, por ejemplo, en las soluciones que ofrece la nube o en las tecnologías de automatización. A continuación, explicamos las características de un edificio inteligente, para que sepas exactamente lo que puedes esperar del edificio del futuro.
No hay edificios que no se puede convertir en un edificio inteligente. No hay edificios que no se puede convertir en un edificio inteligente.
¿Cómo se diferencia un edificio inteligente de un edificio normal?
En un edificio inteligente, o un edificio de oficinas inteligente, todo se une en el campo de la tecnología. Imagínate un edificio de oficinas equipado con varias herramientas útiles. Piensa, por ejemplo, en medir la temperatura de la oficina o en cerrar las puertas. Estas funciones están conectadas a una red y pueden ser gestionadas a través de una aplicación. Esto es posible gracias al ‘internet de las cosas’. En resumen, una migración de redes en el mundo físico y virtual.
Comunicarse a través de dispositivos inteligentes
Gracias al internet, somos capaces de comunicarnos y trabajar con dispositivos inteligentes. En un edificio inteligente, varios dispositivos inteligentes están conectados entre sí. Un edificio de oficinas inteligente está hecho para el futuro. SKEPP tiene una gran variedad de productos inteligentes con los que puedes equipar tu edificio de oficinas. De esta manera puedes crear un edificio inteligente paso a paso. Descubre inmediatamente cómo hacer posible un edificio de oficinas inteligente con Officekit.
¿Cómo puedo convertir mi edificio de oficinas en un edificio inteligente?
¿Estás construyendo un nuevo edificio de oficinas? Entonces considera cómo puedes integrar los dispositivos inteligentes en el edificio. Si alquilas un edificio de oficinas, también puedes crear una oficina más inteligente. Hay varias posibilidades. Por ejemplo, puedes equipar el edificio de oficinas con un sistema de cerradura inteligente o instalar una recepción digital para atender a tus clientes. Además, puedes pensar en un sistema de seguridad con el que puedas asegurar todo el edificio. ¿Y qué tal un sistema de aire acondicionado inteligente?
Así funciona la cerradura sin llave. Así funciona la cerradura sin llave.
Officekit te ayudará
Officekit te ofrece muchas herramientas técnicas que te permiten equipar tu oficina con la última tecnología. Echa un vistazo a la cerradura sin llave. Una herramienta que te permite abrir las puertas con tu móvil. También es posible tener una recepción digital en tu oficina. De esta manera, puedes asegurarte de que tus visitas puedan apuntarse a una cita. Útil, ¿verdad? ¿Y qué piensas de una caja de pago digital? Esto también forma parte de las opciones de Officekit. Es posible integrar Officekit fácilmente en tu entorno de trabajo. Una ventaja adicional: puedes controlar todos los productos desde la aplicación SKEPP.
¿Cuáles son las ventajas de un edificio inteligente?
Como emprendedor, probablemente te preguntas si la transformación a un edificio inteligente es necesaria y qué beneficios traerá. Para responder a esta pregunta, hemos enumerado las ventajas de un edificio inteligente. Echa un vistazo rápido y descubre las ventajas de un edificio inteligente para tu empresa:
Ahorro de costes;
Muy fácil de mantener y actualizar;
Eficiente y sostenible desde el punto de vista energético;
Formarás parte de un mundo laboral moderno;
Puedes optimizar tu entorno de trabajo;
Mejorarás la calidad de vida dentro de la oficina;
Fácil de controlar desde tu móvil a través de la aplicación;
Todos los datos bajo un solo botón.
¿Cuáles son las desventajas de un edificio inteligente?
Crear un edificio inteligente tiene muchas ventajas. Sin embargo, también hay una serie de inconvenientes que hay que tener en cuenta. Piensa en: los altos costos de inversión, privacidad de datos y dependencia de un sistema inteligente. Es importante considerar estas desventajas y las ventajas antes de invertir en un edificio inteligente.
¿Tienes interés? Obtén más información de SKEPP
¿Tiene preguntas sobre los edificios inteligentes y te gustaría saber más sobre Officekit? ¿O estás buscando un edificio de oficinas para el alquiler? Entonces, por favor, contacta a nuestros consultores inmobiliarios de SKEPP. Te ayudarán, de forma gratuita y sin compromiso, a encontrar una oficina adecuada o los productos adecuados de Officekit. Puede contactarnos por teléfono al 932 20 40 57. ¿Prefieres enviarnos un correo? ¡Eso también es posible! Envía tus preguntas a SKEPP - ¡Office as a service!
¿Qué es un edificio inteligente?
La definición de “edificio inteligente” o “vivienda inteligente” ya por sí misma está abierta al debate y presenta diferentes matices y versiones. Incluso los términos empleados para definirlo varían entre idiomas: smart house (casa inteligente), home systems (sistemas domésticos), home automation (automatización de viviendas), domotique (domótica)… Todas ellas, sin embargo, tratan de definir una misma idea: la aplicación de las nuevas tecnologías a la gestión, uso y control del edificio.
En este sentido, podríamos definir un edificio inteligente como aquel que hace uso de todo tipo de nuevas tecnologías para que su uso y control resulte más eficiente.
Gran parte de las tecnologías que incorporan estos edificios inteligentes están dirigidas a mejorar la seguridad de los mismos y de las personas que viven o trabajan en ellos. Algunas de estas novedades son las tarjetas de entrada, tanto para abrir puertas como para accionar servicios, acceso de vehículos o acceder a determinadas áreas del edificio; además, estas tarjetas no sólo están destinadas a facilitar el acceso si no que también registran los movimientos.
Junto a las tarjetas de entrada, también destaca el uso de radiofrecuencia para la ubicación de empleados así como modernos circuitos cerrados de televisión capaces no sólo de grabar lo que sucede en el interior si no también de analizar esta información a través de visión nocturna, reconocimiento facial, etcétera.
Uno de los aspectos que más preocupan a la sociedad actual es el cuidado del medio ambiente y por ello, los edificios inteligentes también incorporan tecnologías que permiten la monitorización y automatización de las condiciones climáticas en su interior como el nivel de humedad o la filtración del aire. Junto a ello, también puede hacer uso de sensores para activar, desactivar o atenuar la iluminación según las circunstancias.
Esto son solo unos ejemplo de las tecnologías que definen a un edificio inteligente, pero las posibilidades reales van mucho más allá. Es habitual diseñar la arquitectura del edificio para optimizar todo el proceso mediante el empleo de metodología BIM, si quieres saber más sobre nuestro Curso BIM no dudes en contactarnos.
javier garcía breva
El edificio inteligente y conectado
Si la Directiva 2010/31/UE definió el edificio de consumo de energía casi nulo como el edificio que, al alcanzar la más alta eficiencia energética, la poca energía que requiere la genera con renovables en el propio edificio o en su entorno, la Directiva (UE) 2018/844 añade al autoconsumo los sistemas de automatización y control del edificio, las infraestructuras de recarga para impulsar la movilidad eléctrica desde los edificios y las aplicaciones inteligentes para promover edificios y comunidades bien conectados.
El edificio de consumo casi nulo se convierte en el edificio inteligente como referencia para los nuevos edificios y los que se rehabiliten a partir de 2021.
Funciones de las aplicaciones inteligentes de los edificios
En el Anexo 1 bis de la Directiva (UE) 2018/844, que modifica la directiva de 2010, se concreta el indicador de preparación para aplicaciones inteligentes de los edificios que incluirá, como elementos para mejorar el ahorro energético, las capacidades de los dispositivos inteligentes, como los contadores inteligentes, los sistemas de automatización y control, dispositivos de autorregulación de la temperatura interior, sensores de calidad del aire y ventilación, electrodomésticos, puntos de recarga para vehículos eléctricos, almacenamiento de energía y la interoperabilidad de estos elementos.
Las funcionalidades que deberán cubrir las aplicaciones inteligentes son tres:
• La adaptación del consumo energético mediante el uso de energías renovables para reducir la demanda.
• Adaptar su funcionamiento a las necesidades del ocupante del edificio de forma sencilla, conservar unas condiciones climáticas interiores saludables e informar sobre el consumo de energía.
• La flexibilidad de la demanda eléctrica del edificio, permitiendo la participación de los consumidores en la gestión de la demanda en relación con la red.
Conectividad e interoperabilidad para la gestión energética de los edificios
El Reglamento delegado (UE) 2020/2155, de 14 de octubre de 2020, ha establecido el régimen, voluntario para los Estados miembros, para valorar el grado de preparación para aplicaciones inteligentes de los edificios. Destacan las definiciones siguientes:
• “Indicador de preparación para aplicaciones inteligentes”: indicador que informa sobre la valoración del grado de preparación para aplicaciones inteligentes de un edificio. El indicador se integra como complemento de la certificación energética, pero no la sustituye.
• “Los beneficios para los usuarios se han de destacar en términos de ahorro de energía, adaptación al cambio climático, mayor inclusividad, accesibilidad, bienestar y ciberseguridad”
• “Conectividad”: la capacidad de los sistemas para intercambiar datos entre sí y la capacidad del edificio, o de la unidad de un edificio, para intercambiar datos con la red y entidades vinculadas, como un agregador u otros edificios.
• “Interoperabilidad”: la capacidad de un sistema para interactuar con el fin de conseguir un objetivo común mediante el intercambio de información y datos.
• La preparación de aplicaciones inteligentes de un edificio, o una parte del mismo, define las capacidades del edificio para que su funcionamiento se adapte en tiempo real a las necesidades de sus ocupantes y de la red para reducir la demanda energética.
• “Las aplicaciones inteligentes sirven para aumentar la eficiencia energética, responder a las necesidades de los ocupantes y añadir flexibilidad energética, o capacidad de ajustar en tiempo real la oferta y demanda energética en el mismo edificio”
La flexibilidad energética requiere edificios inteligentes
La flexibilidad energética es uno de los principales objetivos de los Planes Nacionales Integrados de energía y Clima (PNIEC) y de las Estrategias de Rehabilitación a Largo Plazo (ERLP) por los beneficios que aporta al sistema eléctrico y a los consumidores. El aumento de la capacidad de generación y demanda flexible se basa en el desarrollo de los recursos energéticos distribuidos (DER), como el autoconsumo, almacenamiento, las comunidades de energías renovables, comunidades ciudadanas de energía, microrredes, carga inteligente de vehículos eléctricos, agregadores independientes de la demanda, edificios de consumo de energía casi nulo, contadores inteligentes, y la interoperabilidad de estos recursos.
La energía flexible es, a la vez, energía inteligente. Para ello es imprescindible la figura del consumidor activo o del cliente activo, con derecho a generar, almacenar, agregar, consumir y vender su propia energía renovable. El edificio inteligente es el centro de consumo por excelencia para la transición hacia un modelo de generación distribuida que garantice capacidad de flexibilidad para reducir la demanda energética, costes e inversiones del sistema, abaratar la energía y reducción de emisiones.
El edificio inteligente se basa en la capacidad de generar energía flexible, gestionarla en tiempo real y de forma remota mediante el control del consumidor. Los impactos afectan a la eficiencia energética, mantenimiento y previsión de fallos, comodidad, facilidad de uso, salud, bienestar y accesibilidad, información a los usuarios, flexibilidad y almacenamiento de energía. El ámbito de las aplicaciones inteligentes se extiende a la calefacción, refrigeración, agua caliente sanitaria, ventilación, iluminación, envolvente dinámica del edificio, electricidad, carga de vehículos eléctricos, monitorización y control.
El edificio inteligente es la combinación de los recursos energéticos distribuidos y la participación de los consumidores en el sistema eléctrico que interactúan con las aplicaciones inteligentes para gestionar la demanda energética.
Los edificios del futuro
La visión del futuro de la edificación se concreta en las directivas europeas de renovables, eficiencia energética y mercado interior de la electricidad en edificios inteligentes y comunidades bien conectados. La combinación de la generación distribuida y la gestión inteligente de la demanda se aplica para crear comunidades energéticas locales o municipales energéticamente autónomas.
En el estudio “El edificio en el nuevo paradigma energético” (2020), de Prysmian Group y Schneider Electric, se analiza cómo los edificios son el motor de la transformación del sector eléctrico. La transición energética en la edificación se caracteriza por la combinación de la electrificación, la descarbonización, la digitalización y los recursos energéticos distribuidos. El edificio inteligente incorpora la experiencia de tratar todos los sistemas como un único sistema al reunir la gestión energética, la gestión del edificio y la gestión del trabajo en un único sistema a través de las aplicaciones inteligentes.
Las nuevas tendencias del mercado se caracterizarán por:
• El edificio como central energética y central de datos: alcanzar el objetivo cero emisiones mediante la gestión activa de la demanda y de las energías renovables con el control del consumidor, intercambiando energía con la red, a través de la integración de los datos de la gestión de edificios (BIM) y la digitalización de las infraestructuras de edificios existentes.
• La gestión inteligente del edificio: operar el edificio de forma remota, garantizando la energía y la seguridad de forma permanente, ciberseguridad y protección de infraestructuras críticas para evitar pérdidas operativas.
• La energía como activo del edificio y no como coste: el big data y la inteligencia artificial para reducir costes operativos fijos y mejorar las decisiones para responder a las necesidades de los usuarios.
• Edificios para mejorar el bienestar de las personas: la salud y satisfacción de las personas, la mejora de la productividad en los centros de trabajo, la protección de los ocupantes con edificio más seguros y adaptados a los efectos del clima.
La automatización, la conectividad, la telemedición, el internet de las cosas, el big data, los sistemas inteligentes de gestión y seguridad del edificio, el edifico inteligente o el hogar conectado son conceptos que superan los estándares de eficiencia energética actuales y prefiguran un nuevo modelo de edificación adaptada al concepto de comunidad energética, a través del autoconsumo compartido y la agregación, y un nuevo modelo de urbanismo que afronte las exigencias de la emergencia climática.
La transformación digital de la edificación debería incluirse en los planes de rehabilitación en coherencia con el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia que regula los fondos del Next Generation UE.
Este artículo se publicó primero en La Oficina de Javier García Breva.
Post a Comment