¿Qué es la domótica?

¿Qué es la domótica y cómo funciona?

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La domótica es un tema que sin duda verás en una carrera de arquitectura de interiores. ¿Sabes en qué consiste? Si respondiste que no, ¡el siguiente artículo te interesará!

Cada año, más y más consumidores descubren que los sistemas de automatización del hogar, lejos de ser competencia exclusiva de las personas más conocedoras de la tecnología, tienen algo que ofrecer a todos. Si piensas estudiar arquitectura de interiores, es importante que sepas qué es la domótica. En el siguiente artículo te contamos todo sobre este tema.

¿Qué es la domótica?

La domótica es el control automático de los dispositivos electrónicos de tu hogar. Estos dispositivos se conectan a internet, lo que permite controlarlos de forma remota. Con la domótica, los dispositivos pueden activarse entre sí para que no tengas que controlarlos manualmente a través de una aplicación o asistente de voz.

Por ejemplo, puedes programar que las luces se apaguen cuando te vayas a dormir, o puedes hacer que tu termostato suba el aire acondicionado aproximadamente una hora antes de regresar del trabajo para que no tengas que volver a una casa mal ventilada.

La domótica hace la vida más cómoda e incluso puede ahorrarte dinero en las facturas de calefacción, refrigeración y electricidad. La automatización del hogar también puede dar como resultado una mayor seguridad con dispositivos de internet de las cosas como cámaras y sistemas de seguridad. Pero espera, ¿qué es el internet de las cosas?

Internet de las cosas vs. domótica

El internet de las cosas, comúnmente conocido como IoT, se refiere a cualquier dispositivo que está conectado a internet que normalmente no lo está, por ejemplo, una bombilla inteligente que se puede encender y apagar a través de una aplicación.

Todos los dispositivos de automatización del hogar son dispositivos de IoT, que pueden automatizarse para activarse entre sí. Entonces, si bien el IoT se refiere a los dispositivos en sí, la domótica es lo que puedes hacer con los dispositivos de IoT para hacer tu vida un poco más fácil.

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¿Cómo funciona la domótica?

La domótica funciona a través de una red de dispositivos que se conectan a internet a través de diferentes protocolos de comunicación, es decir, wifi, Bluetooth, ZigBee, entre otros. A través de interfaces electrónicas, los dispositivos se pueden gestionar de forma remota a través de controladores, ya sea un asistente de voz como Alexa o Google Assistant, o una aplicación.

Muchos de estos dispositivos de IoT tienen sensores que monitorean los cambios en el movimiento, la temperatura y la luz para que el usuario pueda obtener información sobre el entorno del dispositivo.

Para realizar cambios físicos en el dispositivo, el usuario activa los actuadores, los mecanismos físicos como interruptores de luz inteligentes, válvulas motorizadas o motores que permiten que los dispositivos se controlen de forma remota.

Así, la domótica funciona en tres niveles:

Monitoreo: El monitoreo significa que los usuarios pueden comprobar en sus dispositivos de forma remota a través de una aplicación. Por ejemplo, alguien podría ver su transmisión en vivo desde una cámara de seguridad inteligente.

Control: El control significa que el usuario puede controlar estos dispositivos de forma remota, como mover una cámara de seguridad para ver otra parte de la sala de estar.

Automatización: Finalmente, la automatización significa configurar dispositivos para que se activen entre sí, como hacer que una sirena inteligente suene cada vez que una cámara de seguridad detecte movimiento.

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¿Cuáles son los beneficios de la domótica?

El propósito de un sistema de automatización es optimizar el funcionamiento de tu hogar. Considera algunos de estos beneficios:

Acceso remoto: controla tu hogar desde dispositivos móviles, incluyendo tu laptop, tablet o teléfono inteligente.

Comodidad: utiliza la domótica para hacer de tu hogar un espacio más cómodo y habitable. Programa tu termostato con tu configuración preferida para que tu hogar esté siempre a una temperatura agradable, configura parlantes inteligentes para reproducir música cuando llegues a casa del trabajo o ajusta las luces para suavizar o iluminar según la hora del día.

Comodidad: programa los dispositivos para que se enciendan automáticamente en determinados momentos o accede a su configuración de forma remota desde cualquier lugar con conexión a internet. Cuando no tengas que acordarte de cerrar la puerta detrás de ti o de apagar las luces, puedes enfocarte en cosas más importantes.

Mayor seguridad: los detectores de incendios inteligentes, los monitores de monóxido de carbono, los sensores de presión y otras funciones de seguridad de domótica pueden ayudar a proteger tu hogar de un desastre.

Eficiencia energética: la domótica te permite ser más consciente de tu uso de energía. Por ejemplo, puedes ahorrar en las facturas de energía reduciendo el tiempo que las luces permanecen encendidas o bajando las temperaturas cuando sales de una habitación.

Hasta este punto, te hemos mostrado en qué consiste la domótica. La automatización de tu hogar no se puede hacer en un día. Al contrario, puedes comenzar poco a poco y luego diseñar tu sistema de automatización del hogar con el tiempo. ¡Esperamos que esta información te haya resultado útil e interesante!

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¿Cómo funciona la domótica en las piscinas?

¿Cómo funciona la domótica en las piscinas?

La domótica actualmente se está aplicando a muy diversos campos, entre ellos, por supuesto, nos lo encontramos en el ámbito de la piscina.

La domótica consiste en la automatización de los elementos que encontramos en nuestra piscina, y hoy en día existen sistemas de última tecnología aplicados al mismo. Las partes más importantes de la domótica en una piscina, están destinados al mantenimiento de la piscina y a la seguridad de la misma.

Este sistema nos aportará una mejor inversión energética, al poder monitorizar todos los parámetros de la piscina de una manera correcta, además de ahorrarnos dinero y tiempo. Las partes más comunes para domotizar son: la filtración (bombas, filtros, sistemas de tratamiento de agua...), iluminación , sistemas de calentamiento, sistemas de deshumidificación y dosificación.

Por supuesto, todo esto puede llegar a ser manipulado desde un cuadro de mandos situado en la casa, hasta poder controlarlo a través de una aplicación en nuestro teléfono y desde cualquier punto del planeta.

También nos pondrá en alerta y con total seguridad, si ocurriera cualquier percance en la piscina y no nos encontráramos cerca de ella en ese momento, resultando un sistema muy eficaz.

Actualmente, la instalación de este tipo de sistemas están teniendo un gran auge, debido fundamentalmente, a que la mayoría de la gente tiene menos tiempo para poder hacer un mantenimiento correcto de su piscina, y de esta manera, prácticamente no tienen que preocuparse, ahorrando ese tiempo para utilizarlo en el disfrute de la piscina.

Los sistemas domóticos o piscinas inteligentes como también se les llama, dependerán del fabricante, ya que cada uno desarrolla sistemas diferentes y se aplicarán para diferentes tipos de máquinas. En algunos casos, de hecho, se trata de sistemas cerrados, en los que el equipo domótico tan solo permite controlar aquellos equipos de un mismo fabricante o incluso de una determinada gama, dentro de su catálogo de productos

Lo más importante para tener un buen sistema de domótica en nuestra piscina, es ponernos en contacto con empresas de piscinas especializadas en estos sistemas y que estén respaldados por el fabricante, ya que muchas veces, nos dirigimos a empresas de domótica que trabajan con sistemas para las viviendas, y en ocasiones, no entienden cómo funcionan los sistemas de filtración, desinfección, calentamiento... de la piscina.

Este 2014, los sitemas domóticos o piscinas inteligentes se presentan como una tendencia y probablemente darán mucho que hablar.

¿Qué es la domótica?

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¿Qué es la domótica?

Podemos definir la domótica como un conjunto de sistemas que permiten el control automático inteligente de las instalaciones eléctricas de una vivienda. Tiene como objetivo optimizar la gestión de la energía y facilitar la vida a sus usuarios.

¿Cómo funciona la domótica?

Hemos dicho que la domótica gestiona los elementos eléctricos de una vivienda de una manera eficiente, pero muchos nos preguntamos qué se precisa para tener un sistema domótico.

Debemos saber que está constituido por una central y por diferentes equipos interconectados en red. De hecho se mantiene el cuadro eléctrico de protecciones con diferenciales y magnetotérmicos que también utiliza la instalación eléctrica de toda la vida. La diferencia está en que la domótica añade unos dispositivos que funcionan vía internet y permiten el control automático de aquellos elementos de la vivienda que estén interconectados. De este modo, una vivienda domótica nos permite controlar de manera automática y autónoma elementos como las luces, la calefacción, la climatización, las cámaras y videos de seguridad, el videoportero, motores, persianas, calefacción y otros elementos adaptados de los que se disponga.

Ventajas de la domótica

La gran ventaja de un control domótico es que podremos accionar los diferentes elementos de la vivienda mediante voz o movimiento y a través de control remoto desde un smartphone, tablet o una smart TV. Una vivienda domótica permite controlar de manera automática los electrodomésticos y/o electricidad adaptado a ello.

¿Qué diferencia hay entre domótica e inmótica?

Cuando hablamos de una instalación domótica o de una instalación inmótica estamos hablando del mismo sistema de automatización inteligente pero a diferente escala. Así pues, la domótica abarca estructuras de menor envergadura como son las viviendas o casas particulares. En cambio, la inmótica trabaja a mayor escala, es decir con estructuras de mayor tamaño como grandes edificios: entre ellos encontraremos centros comerciales, edificios de oficinas, complejos de viviendas u hospitales.

En el caso de inmótica, al operar en la administración de sistemas e instalaciones de estructuras mayores suele proporcionar un porcentaje más alto de ahorro de energía. Eso es debido a que permite optimizar el mantenimiento y el funcionamiento global del edificio con la màxima eficiencia en cada uno de sus sistemas. Así pues, la seguridad, la iluminación o la climatización de un edificio se gestiona utilizando solo y de manera inteligente la energía precisa en cada momento. Proporciona un porcentaje de ahorro de energía que en muchos casos llega al 40%. En el caso de la domótica, al tratarse de viviendas o casas particulares y por ello de edificios de proporciones más pequeñas, el ahorro de energía suele ser un poco inferior, aunque no por ello relevante para la economía familiar.

En la actualidad la domótica está ganando terreno y empieza a formar parte del día a día de muchas viviendas. La domótica ya no es exclusiva de las llamadas casas inteligentes y en diversos grados forma parte de la vida cotidiana de nuestras familias.