Crianza en la era digital

El 60% de los padres quiere formarse en educación digital

El impacto de las pantallas en la vida en familia - ISTOCK

Romper la brecha digital en la relación de las familias con la tecnología es el mayor deseo del 60% de los padres que han participado en el estudio El impacto de las pantallas en la vida familiar, realizado por Empantallados y GAD3, con el apoyo de 'Por un uso love de la tecnología', de Orange.

Los padres, ¿están preparados para educar a sus hijos en tecnología? Teniendo en cuenta que la mayoría son inmigrantes digitales, se dan cuenta de que tienen un nuevo papel, el de mediadores de la tecnología con sus hijos, y por este motivo el 60% de los padres encuestados quiere saber más, necesitan formarse. Charo Sadaba, investigadora sobre menores y tecnología, y Decana de la Facultad de Comunicación de Navarra, considera que "este es el dato más importante del estudio. Quieren formarse para hacerlo mejor". Y considera que "la manera más rápida de formar a los padres es a través de la estrategia".

El estudio ha revelado también que los padres buscan datos y criterios en tres ámbitos por este orden: familia y amigos, colego e internet. Además, el 46% afirma recurrir a webs especializadas para informarse sobre el buen uso de las pantallas.

Las pantallas, ¿unen o separan a las familias?

Entre la más paradójica de las conclusiones del estudio destaca que 4 de cada 10 padres y madres afirman que las pantallas suponen una fuente habitual de conflictos con los hijos. Y es que ante la pregunta de si las pantallas nos unen o nos separan, el 74% de los encuestados asegura que la tecnología les ha unido poco o nada con sus hijos.

En este sentido, Antonio Milán, Doctor en Educación, profesor y autor de Adolescentes hiperconectados y felices, asegura que "la educación digital debe ser un medio de desarrollo personal y no un motivo de discusiones y peleas en casa. Para eso debe empezar muy temprano, con unas pautas claras. Una vez fijadas hay que exigir su cumplimiento con cariño, pero con exigencia".

No obstante, aunque el 55% de las familias encuestadas reconoce que las pantallas facilitan la comunicación durante el día con su pareja, cuando se trata de desconectar y proponer alternativas eficaces para recuperar el diálogo, el 67% de las familias prefieren las escapadas a la naturaleza con sus hijos como primera opción. Así como señala Fernando Sarráis, psiquiatra y autor del libro El diálogo, "los padres tienen un importante papel en la educación de la personalidad de sus hijos para que logren una vida sana y feliz. Ellos deben ser los primeros en practicar el autocontrol de las pantallas en casa. Un buen ejercicio es prescindir del uso de las pantallas en el determinados momentos para favorecer el diálogo entre toda la familia".

Los mayores riesgos del uso de la tecnología

Entre los miedos de los padres destacan el ciberacoso y la relación con desconocidos, seguidos de cerca por el acceso a contenidos inapropiados, la pérdida de tiempo y la sobreexposición de su imagen. Y ¿qué hacen los padres para protegerles? Estamos ante otra paradoja. A pesar de estas preocupaciones, solo 4 de cada 10 padres usa controles parentales para una Internet segura en casa. En este sentido, Charo Sádaba recomienda "no esperar a que el daño tenga lugar para ayudar y acompañar a los hijos en un uso seguro de la tecnología. Como padres y educadores tenemos el deber de hablarles con honestidad, adelantarnos a los temas que sabemos que nos ocupan y mostrar disponibilidad para responder a las inquietudes propias de la edad".

Por tanto, si te preocupa que cuando tu hijo juega online con otros, quizás sean adultos, o si sus contactos en internet son realmente los que dicen ser, hay que etar especialmente alerta y preguntar a nuestros hijos si se han enfadado en Internet, si les ha molestado algo, si han criticado o ridiculizado a alguien... Pero, además, un tercer asunto que preocupa a los padres encuestados es el acceso a contenidos inadecuados como la pornografía. El estudio revela que el 36% de los menores entre 9 y 10 años han accedido a imágenes sexuales sobre todo a través de la televisión y de películas.

Sorpresas interesantes para padres tecnológicos

Inmersos en esta radiografía de los medios digitales en los hogares, surgió durante la presentación esta sorprendente pregunta: ¿en qué se parece la inteligencia artificial a una madre? Seguro que muchas veces habrás tenido que responder a situaciones cotidianas como ésta: ¿dónde está mi camiseta de entrenar? ¿a qué hora tenemos que ir al médico? ¿qué le compro a mi amigo por su cumple?... y como madres y padres nos vemos obligados a analizar esta información en tiempo real. María Zalbidea, analista de tendencias digitales, afirma que "Siri nunca debe sustituir a una madre". "Por el contrario, -apostilla- debemos observar a los hijos y ejercer una escucha activa, anticiparnos a sus necesidades y conocer el perfil tecnológico de nuestros hijos, y sobre todo, que no nos pillen en modo off".

Otra curiosidad en relación a la perspectiva que tenemos los padres sobre la tecnología y el uso que sus hijos hacen de ella es el tema que Gustavo Entrala, experto en Innovación y Branding, bautizó como 'superhéroes digitales: cultiva sus poderes', una nueva saga que ha convertido su talento a través de las pantallas en la gallina de los huevos de oro. Así explicaba que muchas de las actividades que a los padres nos pueden parecer 'frikis' son precisamente las que hay que cultvar y potenciar. Poniendo el ejemplo de Jaime Altozano y Rosalía Vila, entre otros, recomendó a los padres que "facilitaran que sus hijos descubrieran su talento, disfrutaran con lo que les hace diferentes, aprendamos cosas con nuestros hijos y les ayudemos a convertir sus aficiones en proyectos".

Marisol Nuevo Espín

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Niños y tecnología: consejos para padres en la era digital

En un tiempo en que los niños están creciendo en un mundo digital, es importante ayudarles a aprender a hacer un buen uso de las tecnologías. Las ventajas de estos dispositivos, si se utilizan de manera apropiada, pueden ser grandes, pero los estudios han revelado que pasar tiempo cara a cara con la familia, los amigos y los profesores cumple una función fundamental en promover el aprendizaje y el desarrollo saludable de los niños.

Los padres y madres juegan un papel fundamental en este aprendizaje y hay que recordar que se debe aplicar a las pantallas y los entornos digitales las mismas pautas de crianza y sentido común que aplicamos en los entornos reales.

El peligro de utilizar las pantallas como chupete emocional

Los pediatras advierten del peligro de utilizar las pantallas para calmar a un niño. Es cierto que el móvil puede ser muy efectivo para mantener a los niños tranquilos y callados, pero no debe ser la única forma en que los niños aprendan a calmarse. Los niños necesitan que se les enseñe cómo identificar y manejar sus emociones. Si de pequeños no les enseñamos a tolerar pequeñas frustraciones, se dificulta que aprendan a autorregularse, y luego tenemos niños y adolescentes incapaces de contener sus emociones o de expresarse de manera correcta.

¿Cómo tenemos que educar a los niños en el uso de las pantallas digitales?

La Academia Americana de Pediatría (AAP) acaba de hacer pública una serie de recomendaciones, que complementan las que ya se publicaron en el 9º Informe FAROS sobre cómo educar a los niños en el entorno digital, para ayudar a las familias a manejar mejor el uso de los medios digitales y evitar las situaciones y problemas que vienen detectando en sus consultas, y que pueden comprometer el bienestar físico, psíquico o emocional de los menores.

Cread vuestro plan familiar en el entorno digital. El consumo digital debe hacerse de acuerdo con los valores y el estilo de crianza de su familia. Cuando este consumo se hace reflexivamente y de forma adecuada, puede mejorar la vida diaria. Pero cuando se hace sin pensar y de forma inadecuada, puede reemplazar actividades importantes, tales como la interacción personal, el tiempo para la familia, el juego al aire libre, el ejercicio y el tiempo de inactividad para estar desconectado y para dormir.

El consumo digital debe hacerse de acuerdo con los valores y el estilo de crianza de su familia. Cuando este consumo se hace reflexivamente y de forma adecuada, puede mejorar la vida diaria. Pero cuando se hace sin pensar y de forma inadecuada, puede reemplazar actividades importantes, tales como la interacción personal, el tiempo para la familia, el juego al aire libre, el ejercicio y el tiempo de inactividad para estar desconectado y para dormir. Administrad el mundo digital como lo haríais con cualquier otro entorno en la vida de vuestro hijo. Las mismas pautas de la crianza que se aplican en el mundo real, se aplicarán en el virtual. Fijad límites; los niños los esperan y los necesitan. Conoced a los amigos de sus hijos, tanto en línea como en la vida real. Sed conocedores sobre qué plataformas y aplicaciones están utilizando, qué sitios visitan en la red y qué conducta tienen cuando están en línea.

Las mismas pautas de la crianza que se aplican en el mundo real, se aplicarán en el virtual. Fijad límites; los niños los esperan y los necesitan. Conoced a los amigos de sus hijos, tanto en línea como en la vida real. Sed conocedores sobre qué plataformas y aplicaciones están utilizando, qué sitios visitan en la red y qué conducta tienen cuando están en línea. Fijad límites y animadlos a tener tiempo de recreo. El uso de la tecnología, como el resto de las actividades, debe tener límites razonables. El juego no estructurado y fuera del mundo digital estimula la creatividad. Haced del tiempo libre de dispositivos digitales una prioridad diaria, especialmente para los niños más pequeños.

El uso de la tecnología, como el resto de las actividades, debe tener límites razonables. El juego no estructurado y fuera del mundo digital estimula la creatividad. Haced del tiempo libre de dispositivos digitales una prioridad diaria, especialmente para los niños más pequeños. Ver pantallas no debe ser siempre una actividad solitaria. Ver una pantalla juntos, jugar juntos y compartir con los hijos las actividades que realizan con sus pantallas, fomenta la interacción social, el aprendizaje y refuerza vínculos. Jugad a videojuegos con vuestros hijos. Es una buena forma de mostrarles un buen espíritu deportivo y las normas de un buen juego. Mirad un programa con ellos y tendréis la oportunidad de compartir sus propias experiencias y perspectivas de la vida, así como darles consejos. No os limitéis solo a supervisar el tiempo que pasan en línea, participad con ellos para poder estar al día de lo que hacen y ser parte de sus actividades.

Ver una pantalla juntos, jugar juntos y compartir con los hijos las actividades que realizan con sus pantallas, fomenta la interacción social, el aprendizaje y refuerza vínculos. Jugad a videojuegos con vuestros hijos. Es una buena forma de mostrarles un buen espíritu deportivo y las normas de un buen juego. Mirad un programa con ellos y tendréis la oportunidad de compartir sus propias experiencias y perspectivas de la vida, así como darles consejos. No os limitéis solo a supervisar el tiempo que pasan en línea, participad con ellos para poder estar al día de lo que hacen y ser parte de sus actividades. Sed un buen ejemplo. Enseñad y seguid un ejemplo de amabilidad y de buenas maneras en línea. Los niños son grandes imitadores, así que limitad también vuestro propio uso en el entorno digital.

Enseñad y seguid un ejemplo de amabilidad y de buenas maneras en línea. Los niños son grandes imitadores, así que limitad también vuestro propio uso en el entorno digital. Valorad la comunicación cara a cara. Los niños más pequeños aprenden mejor a través de la comunicación bilateral. Las conversaciones pueden ser cara a cara, o si es necesario, por chat de vídeo, cuando un padre tiene que viajar o con un abuelo que vive lejos. Los estudios de investigación han demostrado que la comunicación bilateral mejora las destrezas del lenguaje, mucho más que el escuchar pasivamente o la interacción unilateral con la pantalla.

Los niños más pequeños aprenden mejor a través de la comunicación bilateral. Las conversaciones pueden ser cara a cara, o si es necesario, por chat de vídeo, cuando un padre tiene que viajar o con un abuelo que vive lejos. Los estudios de investigación han demostrado que la comunicación bilateral mejora las destrezas del lenguaje, mucho más que el escuchar pasivamente o la interacción unilateral con la pantalla. No permitáis que los niños pequeños y menores de 18 a 24 meses utilicen medios digitales con excepción de vídeo llamadas. Usad los medios digitales juntos con niños entre 18 y 24 meses de edad porque ellos aprenden cuando miran y hablan con el adulto. Limitad el uso de pantallas de los niños en edad preescolar, entre 2 y 5 años, a solo una hora al día de programación de alta calidad. Mirad los programas juntos con los niños pequeños tanto como podáis. Los niños pequeños aprenden más de las experiencias reales que lo que aprenden en una pantalla.

Usad los medios digitales juntos con niños entre 18 y 24 meses de edad porque ellos aprenden cuando miran y hablan con el adulto. Limitad el uso de pantallas de los niños en edad preescolar, entre 2 y 5 años, a solo una hora al día de programación de alta calidad. Mirad los programas juntos con los niños pequeños tanto como podáis. Los niños pequeños aprenden más de las experiencias reales que lo que aprenden en una pantalla. Cread zonas libres de tecnología. Aseguraros de realizar las comidas en familia y otras reuniones sociales, así como tener las habitaciones de los niños libres de pantallas. Apagad la televisión si no se está mirando ya que el ruido de fondo puede interferir con el tiempo que estáis pasando frente a frente con vuestros hijos. Recargad los dispositivos durante la noche fuera de las habitaciones para ayudar a los niños a evitar la tentación de usarlos cuando deberían estar durmiendo. Estos cambios fomentan el tiempo en familia, hábitos alimenticios más saludables y un mejor sueño.

Aseguraros de realizar las comidas en familia y otras reuniones sociales, así como tener las habitaciones de los niños libres de pantallas. Apagad la televisión si no se está mirando ya que el ruido de fondo puede interferir con el tiempo que estáis pasando frente a frente con vuestros hijos. Recargad los dispositivos durante la noche fuera de las habitaciones para ayudar a los niños a evitar la tentación de usarlos cuando deberían estar durmiendo. Estos cambios fomentan el tiempo en familia, hábitos alimenticios más saludables y un mejor sueño. Realizad una investigación de las aplicaciones. Más de 80.000 aplicaciones se etiquetan como educativas, pero pocos estudios de investigación han revelado su valor real. Los productos que se promocionan como "interactivos" deben requerir más que "pulsar y tocar el panel táctil". Revisad las opiniones de organizaciones como Common Sense Media (Productos mediáticos con sentido), y leed las reseñas sobre aplicaciones apropiadas para cada edad, juegos y programas que os guíen en el momento de elegir los mejores productos para vuestros hijos.

Más de 80.000 aplicaciones se etiquetan como educativas, pero pocos estudios de investigación han revelado su valor real. Los productos que se promocionan como "interactivos" deben requerir más que "pulsar y tocar el panel táctil". Revisad las opiniones de organizaciones como Common Sense Media (Productos mediáticos con sentido), y leed las reseñas sobre aplicaciones apropiadas para cada edad, juegos y programas que os guíen en el momento de elegir los mejores productos para vuestros hijos. Es normal que vuestro hijo adolescente esté en línea. Las relaciones en línea son parte del desarrollo de un adolescente típico. Las redes sociales pueden ayudar a los adolescentes a explorar y descubrir más sobre sí mismos y para identificar su lugar en el mundo de los adultos. Solo hay que asegurarse de que se comporta de manera apropiada en el mundo real y en el virtual. A muchos adolescentes se les debe recordar que las configuraciones de las plataformas de privacidad realmente no hacen "privado" el contenido y que las imágenes, pensamientos y comportamientos que los adolescentes comunican en línea pasan a ser parte de su huella digital de manera permanente. Mantened la comunicación abierta y hacedles saber que cuentan con vosotros si tienen preguntas o inquietudes.

Las relaciones en línea son parte del desarrollo de un adolescente típico. Las redes sociales pueden ayudar a los adolescentes a explorar y descubrir más sobre sí mismos y para identificar su lugar en el mundo de los adultos. Solo hay que asegurarse de que se comporta de manera apropiada en el mundo real y en el virtual. A muchos adolescentes se les debe recordar que las configuraciones de las plataformas de privacidad realmente no hacen "privado" el contenido y que las imágenes, pensamientos y comportamientos que los adolescentes comunican en línea pasan a ser parte de su huella digital de manera permanente. Mantened la comunicación abierta y hacedles saber que cuentan con vosotros si tienen preguntas o inquietudes. Advertid a los niños sobre la importancia de la privacidad y los peligros de los depredadores y la práctica del "sexting". Los adolescentes deben saber que una vez que el contenido es compartido con otros, no podrán borrar o deshacerse de ellos por completo. Esto incluye enviar mensajes de texto con imágenes indebidas. También deben estar enterados sobre la forma de configurar las opciones de privacidad, y se les debe advertir que los depredadores sexuales con frecuencia utilizan las redes sociales, los chats, correos electrónicos y juegos en línea para contactar y explotar los niños.

Hay que tener presente que los niños cometerán errores usando los medios digitales. Intentad gestionar estos errores con empatía y convertid el error en una lección aprendida. Pero algunas indiscreciones, como el "sexting" (envío de contenido erótico), hostigamiento, o enviar imágenes haciéndose daño a sí mismos, pueden ser señales de alerta que indican problemas futuros. Los padres deben hacer una mirada más atenta a los comportamientos de sus hijos y, si es necesario, conseguir el apoyo de un profesional, incluyendo el de su pediatra.

Acceso a las fuentes de consulta:

Las nuevas tecnologías en niños y adolescentes. Guía para educar saludablemente en una sociedad digital. 9è Informe FAROS. Hospital Sant Joan de Déu. [Fecha de consulta: 06/06/2019]

Els nens i la tecnologia: consells per als pares en l'era digital. Healthy Children. [Fecha de consulta: 06/06/2019]

Los pediatras alertan a los padres: no usen el móvil como chupete emocional. La Vanguardia. [Fecha de consulta: 06/06/2019]

Crianza en la era digital

Sonia Livingstone entrevistó a numerosas familias en Gran Bretaña para estudiar cómo madres y padres acogían las nuevas tecnologías de la Información y Comunicación en el desarrollo de sus hijas o hijos. ¿Qué es bueno y qué es malo respecto a las nuevas tecnologías? ¿Qué es lo qué les preocupa ahora a las madres y padres? Hace unos diez años, los dilemas de las familias giraban en torno a dónde ubicar los dispositivos: era mejor en su propia habitación o en otro cuarto. También les preocupaba el acceso a la violencia y a la publicidad. Hoy, esto ha cambiado por completo, pues la tecnología está por todas partes. Los miedos de las familias, asegura Livingistone, son avasallantes: tiempo de uso de las pantallas, videojuegos, pornografía, discursos de odio, código… Esto genera más ansiedad y más presión sobre la crianza y la educación en valores. Por ello, muchas familias quieren controlar todas estas variables que envuelven la relación entre la infancia y las TIC, en esta era digital en la que vivimos.

Sonia Livingstone plantea una pregunta al aire: Como familias y como sociedad, ¿debemos estar abiertas/os al cambio o debemos tener precaución? La experta apunta que, hoy en día, nuestra identidad, nuestras relaciones, nuestros valores y nuestras oportunidades dependen de lo digital. Es por ello que a tantas madres y padres les causa ansiedad, pero si todo ello depende de lo digital sería un gran impedimento limitar el conocimiento y crecimiento de la infancia en todos estos ámbitos.

Sonia Livingstone después de muchas conversas con muchas familias, pudo observar que aquellas madres y aquellos padres que mostraban calma ante la tecnología y el desarrollo de sus hijas/os empleándola, coincidían en que integraban sus valores en la tecnología. Había familias que valoraban la creatividad y empleaban juegos y aplicaciones para desarrollarla. Había familias que valoraban la educación ante todo e integraban plataformas que ayudaban al estudio. Otra de las cosas que pudo observar de este estudio fue la importancia del compartir con sus hijas/os la tecnología, eso ayudaba a crear espacios digitales en familia e integrarla de manera saludable.

Livingstone afirma que «no hay evidencia sólida de que más tiempo de pantalla cause más problemas en la infancia» y que «restringir a la infancia causa resistencia mientras que guiarlos genera juicio». Esto quiere decir que si les acompañamos en el crecimiento y desarrollo con las nuevas tecnologías, podemos fomentar el pensamiento crítico y el juicio, si en cambio les imponemos y les limitamos la tecnología, les estamos ofreciendo una idea negativa en cuanto a ella.